El cólico del lactante se considera una alteración benigna de origen multifactorial, que suele aparecer en las primeras semanas de vida y desaparece espontáneamente alrededor de los 4 o 5 meses. Se caracteriza por episodios de llanto intenso e inconsolable de predominio vespertino, acompañado de otros síntomas sugestivos de dolor abdominal como flexión de miembros inferiores, meteorismo, cara enrojecida, abdomen distendido y tenso.
Es vivido con gran angustia y desolación tanto por el bebé como por los padres. Por eso, es importante aplicar medidas que ayuden a mejorar la calidad de vida de ambos.
El trabajo del fisioterapeuta es fundamental para resolver esta afección y por ello en este post venimos a hablaros de como podemos intervenir en este tipo de alteraciones.
Manifestaciones clínicas del cólico del lactante.
Generalmente, el llanto es inconsolable y muy intenso y difícil de calmar. La cara del bebé suele estar enrojecida, con el ceño fruncido y aspecto de enfadado presentando también palidez alrededor de la boca.
El abdomen se encuentra distendido y tenso que da lugar en muchas ocasiones a ventosidades. El bebé presenta signos de dolor flexionando las piernas y dirigiéndolas hacia el abdomen, aunque pueden permanecer extendidas durante periodos cortos de tiempo.
Las extremidades distales de los miembros superiores están en tensión, los puños permanecen apretados durante el episodio de cólico y los miembros inferiores suelen estar con una temperatura inferior a la normal.
Los síntomas comienzan después de la alimentación y suelen empeorar a lo largo del día. Aunque el cólico es de predominio vespertino, existe variación de un día a otro y también a lo largo del día.
El llanto suele terminar cuando el bebé cae exhausto o cuando defeca o expulsa el gas, volviendo a adquirir un aspecto normal y tranquilo.
Tratamiento fisioterápico.
Entre otras muchas cosas, la fisioterapia puede ayudar a paliar esta situacion; y con un diagnostico adecuado podemos valorar posibles causas que hayan podido desencadenarlo e intervenir en las mismas.
Nuestra labor principal es disminuir el dolor del lactante mediante técnicas manuales tales como:
- Masaje abdominal, que disminuye la distensión del vientre y favorece la eliminación de los gases.
- Masaje orofacial si el lactante succiona de manera incorrecta.
- Osteopatía visceral, cuya finalidad es actuar en los tejidos que intervienen enlas funciones de las vísceras, entre otras cosas.
Por último, cabe destacar que el tratamiento global de este tipo de trastorno también incluye tratamiento farmacológico, pedagógico, dietético, y de cuidados posturales a la hora de amamantar.